Andrea Lamas, 1976. Se forma en Diseño Gráfico en la Universidad de Buenos Aires. Complementa su carrera con talleres de Encuadernación y Libro de Artista. Amplía su formación en talleres de dibujo y pintura con Ernesto Pesce y Eduardo Médici. Asimismo, participa del espacio de clínica coordinado por Tulio de Sagastizábal y de encuentros individuales de análisis de obra con Luis Felipe Noé.
Realizó murales públicos y privados que la condujeron a producir sus pinturas en gran formato. A su vez, en el contexto de la tarea profesional formó parte de proyectos editoriales, comunicacionales, producción de obra y muestras para varios artistas. El diálogo y trabajo con figuras reconocidas en el campo artístico ha nutrido y enriquecido su práctica pictórica a lo largo de los años.
Participó de las siguientes muestras colectivas: “Lo propio y lo ajeno”, Galería Phuyu en colaboración con BlocArt Perú, 2023. “Otra vez, ¡me arruinaste el dibujo!” (Obras en co-autoría con Luis Felipe Noé), Centro Cultural Borges, 2022. “Génesis”, Pagana casa de Arte, 2022. “Obertura”, Pabellón de las Bellas Artes UCA, 2022.
Me interesa “producir imágenes”, estas se erigen en mi visión como un ensayo. Una forma de construir no desde la estructura y el esqueleto, sino desde el cauce y la confluencia. Ríos múltiples que convergen y culminan, de alguna forma, sin la verticalidad de la “disposición predeterminada” en un sócalo final: el lienzo. El ensayo no necesita la mediación de las palabras, salvo quizá las pistas que dejan los títulos de cada pintura, aquel guiño al pasado del que el espectador puede tejer una versión, conectar con lo visual, e intrigarse.
El tema y el quehacer reflexionan la relación entre dimensiones presentes y ausentes. Abordan polaridades y su espectro respecto de los modos de representación. El tema central suele ser un concepto en proceso de transformación. Dándole así, primacía a las sensaciones que recorren ese tránsito –y no la inversa–, para ser las constructoras de la atmósfera que lo rodea.
En torno a estas indagaciones aparece una imagen enrarecida, que parece insinuar una realidad que se manifiesta como potencialidad de algo que aun no ha eclosionado, latente, “tanto-esto-como-aquello-o-nada-más”.
Si pintar es el misterio, observar lo pintado es hallar claridad inconclusa.